Cuando un cliente potencial entra en tu vivienda, te das cuenta que ya ha estado allí. ¿Cómo lo hizo? Pues a través de las imágenes que tienes en tu web o en los portales inmobiliarios, gracias a la fotografía inmobiliaria.
Una imagen puede ser decisiva para que un cliente potencial te contacte.
¿Cuántas llamadas o emails has recibido esta semana?
Sacar fotos atractivas de los espacios interiores y exteriores de una vivienda puede ser un reto, pero hay pequeños detalles en la fotografía inmobiliaria, que si los tomas en cuenta conseguirás estancias menos recargadas y más espaciosas quitando objetos que afean las fotos.
Y en el artículo de hoy voy a hablarte de algunos de ellos.
Salón. Empieza por lo más fácil
El salón es una estancia que generalmente suele estar ordenada, por si aparece alguna visita.
Igualmente hay objetos que no deben aparecer en la fotografía inmobiliaria como los mandos de la televisión, mandos de vídeo juegos, llaves, cables que están por el suelo, accesorios de mascotas, fotografías familiares si las hay en exceso.
Recuerda que menos es más y todo aquello que distraiga demasiado, debes ocultarlo.
Aunque no me creas, he visto salones con objetos que ni te imaginas que puedes encontrar en ese lugar. Si no te choca a la vista, es mejor retirarlo del encuadre de tu cámara.
Terraza y/o balcón
Dependiendo del tamaño, solemos tener plantas, accesorios de las mascotas, artículos de limpieza, como cubos y fregonas, entre otros objetos que no aportan nada en las fotos, sobre todo las plantas secas.
Oído cocina
Afina bien la vista, porque siempre hay algún objeto indeseable que se te puede pasar por alto, como las notas pegadas de la nevera y los escurridores de vajilla.
Da igual si son trapos de cocina desgastados o nuevos, deben guardarse en un cajón.
Si tus mascotas duermen en la cocina, tienen algún depósito de agua y sus juguetes favoritos, te recomiendo que el día de la sesión de fotos los coloques en otro lugar.
A veces me encuentro con pisos pequeños que no tienen espacio para guardar estos objetos, lo que hago es trasladarlos a otra habitación mientras fotografío la cocina. Y así voy haciendo las fotos.
Habitaciones: Keep calm and carry on
Una vez me contactó una familia numerosa, para hacer una sesión de fotografía inmobiliaria en su vivienda de seis habitaciones. Al entrar y observar la cantidad de cosas que tenían, sentí un sudor frío que recorría toda mi espalda.
Afortunadamente, tuve ayuda de una persona que trabajaba en la casa. Los colores me volvieron al rostro.
Los aparatos de gimnasia y objetos que se asoman por debajo de la cama, no deberían salir en las fotos.
En las habitaciones suelen haber fotografías personales, ya sean propias o de familiares, por lo tanto es mejor guardarlas.
Si te encuentras con grafitos, pintadas, firmas en las paredes o en los armarios, te recomiendo que las borres cuando las estés editando.
El baño: La intimidad a la vista de todos
Los productos de higiene personal pueden decir mucho de las personas que viven en la casa, así que es mejor retirarlos, tal como las batas de baño, toallas de colores y diseños llamativos.
Otros objetos que debes quitar antes de hacer la fotografía inmobiliaria, son alfombras, mobiliario especial para duchar a personas mayores, y cualquier otro que robe espacio.
Hasta aquí el artículo de hoy. Si te interesa saber más, no te puedes perder mi otra entrada sobre cuáles son las dos aplicaciones mejor valoradas para retocar imágenes desde tu smartphone, en donde podrás aplicar las herramientas vistas.
Estoy segura que, después de estas recomendaciones, vas a darte cuenta enseguida de los objetos que no deben verse en las fotografías de tu inmueble.
Descubre en este enlace, el tipo de fotografía inmobiliaria que quieres para tus inmuebles.
Si ya lo tienes claro, cuéntame cómo puedo ayudarte.
Y tú, ¿quitarías también las fotografías personales? Déjame tu respuesta, me gustará leerla.